Situs sbobet resmi terpercaya. Daftar situs slot online gacor resmi terbaik. Agen situs judi bola resmi terpercaya. Situs idn poker online resmi. Agen situs idn poker online resmi terpercaya. Situs idn poker terpercaya.

situs idn poker terbesar di Indonesia.

List website idn poker terbaik.

Situs agen slot terpercaya dan resmi

Pinchando la Página

Canarias

KAROL SIMÓN: CÓMO SUPERAR EL MIEDO AL RIDICULO

KAROL SIMÓN: CÓMO SUPERAR EL MIEDO AL RIDICULO

El miedo al ridículo existe en el corazón de la mayoría de las personas, sin embargo, este sentimiento no se da en la misma medida. Existen personas que a pesar de tener temor, no se paralizan, es decir, siguen afrontando retos como hablar en público o hacer algo en contra de la opinión de los más cercanos. El miedo al ridículo es tan poco saludable como el temor al qué dirán, porque quien vive a merced de la voluntad ajena, termina no viviendo en algún momento.
Libérate de las cadenas emocionales

El miedo al ridículo te mantiene atado a prejuicios y a cadenas internas que te hacen sufrir. Por ello, hoy es un buen día para empezar de nuevo y hacer cambios en tu vida. Para superar el miedo al ridículo es práctico realizar actividades como teatro, un curso de risoterapia o hablar en público porque poco a poco, a través de la práctica, te das cuenta de que te vas sintiendo más cómodo en este contexto.

Por otra parte, analiza dónde te conduce ese miedo al ridículo, y si analizas las consecuencias de verdad, te darás cuenta, de que a larga, no compensa seguir por ese camino: por tanto, cultiva tu autoestima y tu yo interno, para mostrarte tal y como eres, en cualquier lugar.

Ríete de ti mismo

Reírte de ti mismo es un síntoma de tener mucha autoestima, por tanto, pon en práctica el humor y la ironía que te permite aprender a relativizar: ¿Qué es lo peor que puede pasar en caso de meter la pata al hablar en público? Pero además, recuerda que la sensación de ridículo es muy subjetiva, tú la notas desde dentro, pero en realidad, puede que aquellos que desde fuera hayan vivido esa situación, no opinen lo mismo.

El miedo al ridículo es más propio de personas que son muy tímidas, pero también, puede estar causado por malos recuerdos vividos en la infancia. Y además, las personas que viven de cara a la galería tampoco quieren perder el control.

Cómo ganar confianza en uno mismo

Para conseguir tener confianza en uno mismo el secreto está en comportarnos y actuar con total naturalidad y por supuesto, aprender a reírse de uno mismo. Para ello debemos ir dando pasos cortos pero seguros e ir alcanzando las metas que nos vayamos proponiendo en nuestra vida con la mayor dignidad y confianza posibles.

El primer paso que debemos dar es intentar vivir la vida con más naturalidad y bajar el nivel de nuestra alerta. Si tenemos un poco de vergüenza es síntoma de madurez, en contraposición con la falta de pudor de los más pequeños o el descaro de los adolescentes. De hecho, es el mismo sentido del ridículo el que nos ayuda a encontrar un equilibrio entre el atrevimiento y la prudencia. Pero cuando sentimos vergüenza en exceso, ésta nos puede llegar a atemorizar e incluso restarnos espontaneidad o bloquearnos.

Es común oír que la vergüenza es la emoción del sentimiento de inferioridad. El sentido del ridículo nos suele acechar cuando pensamos que quienes nos rodean pueden construirse una opinión o imagen negativa sobre nosotros, pero debemos tener en cuenta que lo que piensen los demás sobre nosotros mismos nunca será tan importante como lo que en realidad somos.

Cuando las miradas nos intimiden o notemos que nos hemos puesto colorados, busquemos la parte cómica de la situación. Nadie te juzgará muy severamente si reaccionamos con buen humor y con naturalidad. Lo más importante sin duda, es actuar de tal manera que no nos pongamos colorados ante nosotros mismos.

Hablar en público

Cuando tengamos que acudir a algún lugar donde haya que hablar en público como puede ser una reunión de vecinos, una reunión en el colegio de nuestros hijos, etc. pueden servirnos de ayuda algunos consejos.

En ocasiones queremos explicar tanto y tan bien las cosas que no podemos conseguir un discurso coherente. Para conseguir una buena presentación necesitamos una sola idea que debe resumirse en una única frase.

Si nos jugamos algo importante, podemos hacer un guión y ensayar nuestra exposición. Para ello es importante tener preparado un buen comienzo ya que los tres primeros minutos son fundamentales.

Es imprescindible intentar que las personas que nos están escuchando, acaben compartiendo nuestro punto de vista, pero en ningún caso hay que tratar de imponerlo.

CUANDO UNO ES INCAPAZ DE REIRSE DE SI MISMO, HA LLEGADO EL MOMENTO DE QUE LOS OTROS SE RIAN DE EL…

Despiertate Happy

marzo 18th, 2015

No Comments