Este martes se celebró la primera semifinal del Festival de Eurovisión, donde Armenia y Suecia, las grandes favoritas en los pronósticos, y otros aspirantes bien situados como Hungría, Ucrania y Azerbaiyán lograron el pase a la gran final.
Las otras cinco plazas para la cita definitiva que se decidieron en la primera semifinal las ocuparon Rusia, Montenegro, Holanda, Islandia y San Marino, que ganaron el favor del público y del jurado, que conforman a partes iguales el voto total.
Uno de los momentos más sonados de la gala fue cuando los presentadores anunciaron el nombre de Rusia como uno de los países clasificados para la gran final.
Las gemelas rusas Tolmachevy Twins, que realizaron una incalificable coreografía con sus pelos entrelazados y cantando desde los extremos de un balancín gigante, saltaron de alegría. Sin embargo, esa decisión no gozó del favor de cierta parte del público, que les regaló un bochornoso abucheo, motivado probablemente por algún malentendido geopolítico
