“Cuando suena la radio, subo el volumen y la escucho. Pero no el solo de guitarra, soy demasiado viejo ya para el solo de guitarra”, ha dicho Brian May (ser guitarrista, compositor, vocalista y en ocasiones teclista) en una entrevista en la BBC con motivo del 40 aniversario de ‘Bohemian Rhapsody’, una de las canciones cumbres de Queen.
La canción de ‘opera rock’ por excelencia, ha vendido más de 6 millones y medio de copias en todo el mundo, se ha versionado hasta la saciedad y ha sido dos veces número 1 en las listas: en el 75, cuando se publicó, y en el 91, cuando la banda la relanzó con motivo de la muerte de Freddie Mercury, con fines benéficos. No está mal para una canción que la compañía discográfica dijo que nunca se pincharía en la radio porque era “demasiado larga”.
Freedie Mercury no la concibió como una pieza de rock sino como rapsodia, una pieza clásica que se caracteriza porque une varias partes “libres” que no tienen nada que ver entre sí.
‘Bohemian Rhapsody consta de 6 secciones: introducción a capela, balada, solo de guitarra (considerado como uno de los mejores de todos los tiempos), ópera, rock y coda.
La primera vez que Queen interpretó ‘Bohemian Rhapsody’ en directo fue en su concierto de Liverpool un mes después de editarla y gustó tanto, que a partir de entonces, la tocaron en todos los conciertos de la banda.
La temática de la canción es el gran enigma. Mercury se negó a explicar su composición, diciendo sólo que trataba sobre relaciones, sin más.
Tal fue el éxito de la enorme ‘Bohemian Rhapsody’, que hasta a los míticos Teleñecos la versionaron.
